Mis mejores deseos para el 2008

(Foto de distribución libre de la NASA, tomada por la tripulación de la misión Apolo XI desde la luna)

El cultivo de la humanidad: llegar a ser lo que somos

Toda educación responde a una idea previa de lo que es la perfección humana, siempre se educa en función de unos ideales comunitarios y para que los ciudadanos sean mejores. Educar es conducir a la gente a que desarrollen al máximo sus capacidades. Una buena educación no debe limitar al individuo (la educación actual nos conduce a la especialización, enjaulándonos como personas). La educación debe tender a llevar al individuo a ver las posibilidades y potencialidades de la vida.

En cierta forma, la nueva asignatura "Educación para la ciudadanía" trata de soslayar las limitaciones propias de nuestra época donde los programas de estudio nos llevan a la super-especialización (por las características propias de nuestro mercado laboral).

Todos los ciudadanos tendríamos que conducir nuestra existencia hacia el ideal de la educación: "todos los ciudadanos iguales en un camino de busqueda de la belleza y la sabiduría". Y con belleza no me refiero únicamente a la estética, sino también a la ética (en griego se utiliza la misma palabra para los dos conceptos). La ética actual queda reflejada en los "Derechos Humanos". Y la sabiduria, el saber, también entendido desde una perspectiva clásica, los saberes de las prácticas que sirven para vivir a diario. Se confunde a menudo con la erudición, siendo totalmente diferentes, el saber tiene una componente más práctica.

Hacia la Sociedad del Conocimiento desde la perpectiva de la Ciencia y la Tecnología

El 4 de noviembre de 2005, la Unesco publicaba un informe titulado "Hacia las Sociedades del Conocimiento». La Sociedad del Conocimiento es una sociedad culta que aprecia la ciencia y la tecnología como fuente de resolución de muchos de sus problemas y de generación de bienestar. La investigación y la innovación tienen como actores principales: (1) las empresas e industrias, (2) universidades e instituciones científicas de investigación y, (3) organismos gubernamentales.

Cuantos más denso sea el tejido de interrelaciones entre los principales agentes motores de la innovación, ciencia y tecnología, mayor es el desarrollo de la Sociedad del Conocimiento en la comunidad.

Recientemente el "Informe Lambert" ha puesto de manifiesto la necesidad de establecer políticas científicas que aumenten "la demanda que las empresas hacen de investigación a las Universidades". Punto importante, porque tradicionalmente se ha incidido en la importancia del flujo de ideas desde la Universidad hacia las empresas, estableciendo pocas actuaciones en el sentido contrario.

El plan Canario de I+D+I de 2003-2006 está inmerso en esta óptica, recayendo el protagonismo de la transferencia sobre las Universidades: "El esfuerzo presupuestario realizado debe revertir a la sociedad a través de un esfuerzo de valoración, difusión y diseminación de los resultados obtenidos. Para ello, se impulsará el fortalecimiento de la función de transferencia de tecnología en los centros públicos de I+D de Canarias."

Por cierto, ¿que ha pasado con el plan Canario de I+D+I a partir del 2006? ¿Qué grado de cumplimiento en los objetivos hay? En Canarias contamos actualmente con la "Ley 5/2001 de Promoción y Desarrollo de la Investigación Científica y la Innovación".

Los villancicos y el próximo tránsito orbital

En estas fechas quería dedicarle un post a los villancicos, esos seres a los que hacemos oidos sordos. Hay una cosa que no entiendo, cada año tenemos una canción del verano, es mala, pero al siguiente periodo estival aparece una nueva y trauma superado. Sin embargo, los villancicos siempre vuelven por Navidad, con esas letras: "a donde vas partocillo, voy a llevar al portal requesón, manteca y vino"... ¡¡¡pero vino para quien!!!; para el niño Jesús, pues no se si es lo mejor en el caso de un recien nacido, igual es mejor una cantimplora con leche materna, digo yo.

Y el requesón será para la Virgen María -sin sentido- a una mujer que acaba de pasar por el hospital y está en post-operatorio le vas a llevar requesón... sobre todo cuando el niño Jesús vino por cesarea, la aeureola no le cabía; eso si, el médico estaba contento, el niño vino con asa y fue más fácil sacarlo.

Pero otros villancicos tampoco tienen desperdicio, el pobre San José tiene que estar hasta los mismisimos de ese que dice: "Dime niño de quien eres todo vestidico de blanco, soy del Espíritu Santo y de la virgen María...". Suponemos que el tal Espíritu Santo le pasará una pensión de manutención para el niño (pobre San José, año tras año recordando el momento). Además, a San José los ratones, en vez de comerle el requesón en el portal, le comen los calzones, ya es mala suerte por todos los lados.

Nada, que los dicho, los villancicos, ese sin sentido anual. Por cierto, mañana es 21 de diciembre, solticio de invierno, mis mejores deseos en este nuevo tránsito orbital.

Cultura y desarrollo económico

Leyendo hoy documentos oficiales me he llevado una grata sorpresa, he encontrado que el objetivo estratégico fijado para la Unión Europea por el Consejo Europeo de Lisboa de marzo de 2000 es el de «convertirse en la economía basada en el conocimiento más competitiva y dinámica del mundo, capaz de crecer económicamente de manera sostenible con más y mejores empleos y con mayor cohesión social». También hay un mandato específico del Consejo Europeo a los Ministros de Cultura de emprender «una reflexión general en el Consejo sobre los futuros objetivos precisos de los sistemas educativos, centrada en intereses y prioridades comunes y que respete al mismo tiempo la diversidad nacional».

Como declaración de principios suena bien, la "economía del conocimiento"; y lo del respecto a la "diversidad nacional" totalmente de acuerdo. Ya tengo un punto de referencia a la hora de analizar la realidad desde una óptica europeista...

Sísifo

Leyendo el blog de una persona que he ciber-conocido hace poco tiempo me vino un recuerdo de juventud, un poema releído cientos de veces de Miguel de Unamuno. Recitado en la intimidad de mi cuarto, cuando el corazón se rompía por un romance fallido, calmó horas aciagas (por entonces, temporalmente, cursaba el segundo año de físicas en la Universidad de Zaragoza). Y es que prefiero pensar que la aparente recaída humana en los mismos errores y conflictos no es tal.

Así que hoy he dedicado un rato a bucear entre mis viejos libros de poesía (este me ha acompañado desde 1992, y sigue igual de fresco que entonces). El poema en cuestión se titula Sísifo, y os lo trascribo aquí, espero que lo disfruteís:

Siglos de siglos la maldita roca
volteó, abrumado, hasta la cumbre Sisifo;
con el roce molíala, y en polvo
que coronaba en nube su cabeza,
la iba esparciendo sobre el suelo el viento
que enjugaba el sudor que el cuerpo baña
del condenado. Y la montaña misma,
la de empinada cresta, se embotaba
como diamante a friega de diamante.

Vencedor del suplicio, está el soberbio
descansando -¡descansa al fin!- tendido
de una colina sobre el lomo suave,
con paz respira y en la mano tiene
un rodado predusco con que juega
como con una taba juega un chico,
y en el cielo sus ojos silencios
fijando sin rencor, decir parece:
¡Se acaba todo, oh Jove, hasta la pena!

(Poesía de Miguel de Unamuno)

Navidad, ya está aquí...

Hoy me he levantado con el recuerdo de la calle La Salle, iluminada en toda su extensión con cientos de bombillas, y de algún modo, pensé que tenía que decorar el blog con algún motivo navideño. Con energía me he puesto a navegar, buscando cuadros que represente el nacimiento, a modo de Belén pictórico, y he encontrado un cuadro de Perugino (estoy intentando encontrarlo con mejor resolución).

Los recuerdos de la infancia siempre regresan en Navidad. En mi casa siempre montabamos un belén por estas fechas, buscando serrín, construyendo con corcho las montañas, el papel de aluminio nos servía para construir el río donde poner unos pequeños patos,...